El término trastornos musculoesqueléticos se usa colectivamente para síntomas y enfermedades de los músculos, tendones y/o articulaciones. Dichos trastornos a menudo no se especifican y pueden variar en duración. Los principales factores de riesgo de los trastornos musculoesqueléticos relacionados con el trabajo son el levantamiento de objetos pesados, las posturas de trabajo incómodas, las tareas laborales repetitivas, el estrés psicológico y la organización inadecuada del trabajo (ver figura 1).
Figura 1. Manipulación manual de pescado en una planta empacadora de pescado en Tailandia
En 1985, la Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió la siguiente declaración: “Las enfermedades relacionadas con el trabajo se definen como multifactoriales, donde el ambiente de trabajo y el desempeño del trabajo contribuyen significativamente; sino como uno de varios factores que causan la enfermedad” (OMS 1985). Sin embargo, no existen criterios internacionalmente aceptados para las causas de los trastornos musculoesqueléticos relacionados con el trabajo. Los trastornos musculoesqueléticos relacionados con el trabajo aparecen tanto en los países en desarrollo como en los desarrollados. No han desaparecido a pesar del desarrollo de nuevas tecnologías que permiten que las máquinas y las computadoras asuman lo que antes era trabajo manual (Kolare 1993).
El trabajo a bordo de los buques es física y mentalmente exigente. La mayoría de los factores de riesgo bien conocidos de los trastornos musculoesqueléticos mencionados anteriormente suelen estar presentes en la situación y organización del trabajo de los pescadores.
Tradicionalmente, la mayoría de los trabajadores de la pesca han sido hombres. Los estudios suecos sobre pescadores han demostrado que los síntomas del sistema musculoesquelético son comunes y que siguen un patrón lógico según la pesca y el tipo de tareas laborales a bordo. El setenta y cuatro por ciento de los pescadores habían experimentado síntomas del sistema musculoesquelético durante los 12 meses anteriores. La mayor parte de los pescadores consideraban que el movimiento de la embarcación suponía un gran esfuerzo, no solo para el sistema musculoesquelético, sino para el individuo en su conjunto (Törner et al. 1988).
No hay muchos estudios publicados sobre trastornos musculoesqueléticos entre los trabajadores del procesamiento de pescado. Existe una larga tradición de dominación femenina en el trabajo de cortar y recortar los filetes en la industria de procesamiento de pescado. Los resultados de estudios islandeses, suecos y taiwaneses muestran que las trabajadoras de la industria de procesamiento de pescado tenían una mayor prevalencia de síntomas de trastornos musculoesqueléticos del cuello o los hombros que las mujeres que tenían trabajos más variados (Ólafsdóttir y Rafnsson 1997; Ohlsson et al. 1994; Chiang et al. 1993). Se pensó que estos síntomas estaban causalmente relacionados con las tareas altamente repetitivas con un tiempo de ciclo corto de menos de 30 segundos. Trabajar con tareas altamente repetitivas sin posibilidad de rotación entre diferentes puestos es un factor de alto riesgo. Chiang y colaboradores (1993) estudiaron a trabajadores de la industria de procesamiento de pescado (hombres y mujeres) y encontraron una mayor prevalencia de síntomas de las extremidades superiores entre aquellos con trabajos que implicaban una alta repetitividad o movimientos contundentes, en comparación con aquellos en el mismo fábricas que tenían trabajos con baja repetitividad y movimientos de poca fuerza.
Como se mencionó anteriormente, los trastornos musculoesqueléticos no han desaparecido a pesar del desarrollo de las nuevas tecnologías. La línea de flujo es un ejemplo de una nueva técnica que se ha introducido en la industria de procesamiento de pescado en tierra ya bordo de buques de procesamiento más grandes. La línea de flujo consta de un sistema de cintas transportadoras que transportan el pescado a través de máquinas descabezadoras y fileteadoras hasta los trabajadores que toman cada filete y lo cortan y recortan con un cuchillo. Otras cintas transportadoras transportan el pescado a la estación de empaque, después de lo cual el pescado se congela rápidamente. La línea de flujo ha cambiado la prevalencia de los síntomas musculoesqueléticos entre las mujeres que trabajan en las plantas de fileteado de pescado. Después de la introducción de la línea de flujo, la prevalencia de síntomas de las extremidades superiores aumentó mientras que la prevalencia de síntomas de las extremidades inferiores disminuyó (Ólafsdóttir y Rafnsson 1997).
Para desarrollar una estrategia para su prevención, es importante comprender las causas, los mecanismos, el pronóstico y la prevención de los trastornos musculoesqueléticos (Kolare et al. 1993). Los trastornos no pueden ser prevenidos exclusivamente por las nuevas tecnologías. Debe tenerse en cuenta todo el entorno de trabajo, incluida la organización del trabajo.